Sueños del pasado, sueños del presente. Imaginando un futuro diferente. Los sueños están llenos de pasión, de esperanza, de deseo de algo o alguien mejor, una mejor oportunidad de vida, un futuro diferente. Los soñadores, se guían por su placer. Dejen me explicó.
Los seres humanos nos guiamos por nuestros sentimientos, nos acercamos a lo que nos da placer, alegría, gozo, o nos alejamos de lo que nos provoca dolor, miedo, ansiedad entre otros males. Hacemos algo porque nos da una emoción positiva o nos alejamos de un sentimiento o una sensación negativo.
Por otro lado, hay sensaciones “dolorosas” que nos dan placer, como hacer ejercicio y tener un régimen de alimentación especial, que aunque nos da dolor, a largo plazo, lo hacemos para sentir el placer de tener un buen cuerpo y una buena salud.
Un soñador tiene una imagen del futuro que quiere vivir, tal vez, esa imagen no es clara pero lo motiva dar pasos para cumplir su sueño. Eso es lo que hacen los soñadores proactivos, no solo se pasan la vida esperando a que su sueño se cumpla, hacen que se cumpla. Toman clases especiales, se mudan de ciudad, conocen a personas que les ayudan a ser mejor, mejoran sus circunstancias, entre otras cosas.
En el camino de los soñadores proactivos, los que dan pasos para cumplir su sueño, pasan por dos caminos. Por un lado su sueño se hace más claro, saben que camino seguir en base a su pasión y se les va haciendo más claro, a veces tienen bajones o problemas para dar un paso adelante y hay quienes pasan la prueba que les pone la vida para cumplir su sueño y hay quienes se rinden.
Por otro lado, hay quienes en su camino para cumplir su meta, encuentran otro camino, su primera meta los esta llevando a algo que ni esperaban. Tienen circunstancias que nunca se hubieran imaginado. Un sueño puede llevarte a descubrir tu verdadera pasión y cumplir tu verdadero propósito. Al igual que los anteriores, a veces tienen situaciones “difíciles” o mejor dicho pruebas, pruebas que te pone la vida para ver si eres digno de tu sueño.
“Cada momento de tu vida es una prueba o una celebración” — David Deida.
Hay que recordar que nuestro tiempo en la tierra es limitado, no nos podemos pasar la vida esperando que las cosas sucedan. Como dice David Deida, “Cada momento que esperes, es un momento mal gastado. En está categoría entran los soñadores que les da miedo ir por lo que en verdad quieren y los que se conforman con lo que la sociedad les dice, estos dos tipos no viven por un propósito interno, ni por algo que les de placer. Esta clase de personas so los que solo viven para alejarse del dolor.
De estos últimos, solo hay un soñador, el que espera que sus circunstancias cambien para que cambie su vida, como los que esperan sacarse la lotería y compran el boleto esperando tener suerte. El otro tipo de persona, ya perdió la esperanza, él no compra un billete de lotería porque en su interior dice “Para que gasto mi dinero en esto, si nunca me gano nada”.
Este último vive una vida basado en lo que las personas y la sociedad espera de ellas. Su meta es cumplir con lo que la sociedad espere de él. Si la sociedad espera que no pierda su trabajo, hace todo lo posible por no perderlo, en vez de hacer algo por mejorar de puesto. Este tipo de personas no hace nada por cumplir su propósito interno, ellos ya se entregaron a las circunstancias y no hacen nada para cambiarlos.
Estas personas son las que piensan que el mundo es malo y que su vida apestan. Son personas que solo aspiran a tener una felicidad o sensaciones positivas por estímulos externos. Este tipo de personas se deja influenciar por la negatividad de los medios masivos de comunicación, se llenan de imágenes de pobreza, escasez, desesperanza, sufrimiento entre otras cosas. Estas personas no tienen o no buscan estímulos positivos en su vida, como lo pudiera ser historias de personas que sobrepasaron sus dificultades y cambiaron sus circunstancias o de sociedades que mejoraron o sucumbieron a las dificultades que vivían en ciertos momentos. hay ejemplos de sociedades que salen exitosos de situaciones extrañas como terremotos o inundaciones. O de personas que vivieron circunstancias deplorables y deprimentes pero no se rindieron y cambiaron su modo de ver la vida para vivir en las circunstancias que querían vivir.
“Se dice que un gran sabio le dijo a un emperador romano: ` cuando llegue el día de tu muerte, morirás sin haber vivido´. Despertemos para que esto no sea nuestro epitafio.” — Antony De Mello
Regresando a los que cambiaron de meta por seguir su sueño o mejor dicho, su sueño los llevo a otro. A veces se sienten confundidos, a veces uno piensa que su primer sueño, es su identidad y parece que están perdidos o aun tienen dudas de su nueva meta por no ver “resultados”. Los resultados son importantes pero hay que tener en cuenta una ley fundamental de la vida “Confía en el proceso y no te limites a un resultado, aprende de la experiencia”.
A este tipo de personas les doy un consejo, algo que estoy haciendo actualmente. “Activaté haciendo ejercicio, elogia tus progresos, imagina tus encuentros y actúa de la forma que quieres sentir.” Eso porque al hacer ejercicio cambias tu fisiología, mejora tu salud, activas sustancias en el cuerpo que te ayudan a estar en equilibrio. Si a eso, le añadimos una buena respiración, o mejor dicho, una respiración consciente, mejoraremos muchos aspectos en nuestra vida como es la reducción de los niveles de estrés y tensión del cuerpo.
Un consejo importante. Seas soñador o no soñador, debes evitar comparar tus resultados con otros, en especial con personas similares a ti con la misma meta. No te compares. La comparación te lleva a tener una baja autoestima si tus resultados no son buenos o a un elevado nivel de soberbia, si tus resultados sobre pasan a los de tu competidor. No es una competencia. Confía en el proceso que estas tomando. Toma cursos o actividades extras que te ayuden a llegar a donde quieres. Pide ayuda. Y cuando te estanques en un punto, da un paso para atrás, piensa bien las cosas y sigue adelante.
—Joseph
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